Día Mundial de los Refugiados, sábado 20 de junio de 2020, Declaración de la FSM
La Federación Sindical Mundial rinde homenaje al Día Mundial de los Refugiados, que se conmemora cada 20 de junio siguiendo una decisión aprobada por las Naciones Unidas en el año 2000. La agresividad del imperialismo para controlar y explotar los mercados, los recursos naturales y las rutas energéticas, sumada a la barbarie capitalista, las políticas enemigas de los trabajadores y los pueblos; a la que se añade el hambre, la pobreza y el moderno comercio de esclavos, son los principales factores causales que de manera directa o indirecta han conminado a millones de seres humanos al desplazamiento forzado. De acuerdo con los datos de la ONU, se estima que al menos 70,8 millones de personas en todo el mundo se han visto obligadas a abandonar sus hogares. Entre ellos se cuentan unos 25,9 millones de refugiados; y a cada minuto se registra la fuga de 20 personas que deben abandonarlo todo para escapar de las guerras, las persecuciones o el terror.
Los refugiados constituyen unos de los grupos sociales más vulnerables al ser desarraigados de sus lugares de residencia y terminar en los así llamados países de acogida donde, en la mayoría de los caos, viven en condiciones infrahumanas, sufriendo de inseguridad y viéndose privados de las necesidades básicas. Los refugiados, al igual que los migrantes por razones económicas y todas las demás personas desplazadas por la fuerza, son tratados como un “ejército de reserva” para la producción capitalista. Cuando los capitalistas necesitan aumentar la producción, los refugiados y migrantes son explotados como mano de obra barata que faena en condiciones laborales inseguras y miserables con salarios de hambre. Mientras tanto, cuando la producción se ve limitada debido a motivos económicos, como regla, ellos son expulsados automáticamente del proceso productivo, sin ninguna compensación o ayuda, perdiendo incluso la magra paga que percibían.
Las consecuencias del COVID-19 y la indiferencia de los gobiernos y los centros internacionales generadores de políticas han exacerbado los problemas y desafíos que deben encarar los refugiados. La pandemia actual ha revelado de manera sumamente trágica cuán vulnerables son las personas desplazadas, tanto en términos de salud, seguridad, empleo y subsistencia. Por lo tanto, denunciamos la hipocresía de los países imperialistas y de la mayoría de las organizaciones internacionales que realizan grandilocuentes declaraciones acerca de los refugiados mientras provocan o toleran el desarraigo y el empobrecimiento de millones de personas a la vez que prestan servicio a los intereses monopólicos.
El movimiento sindical con orientación de clase une a millones de trabajadores en todos los lugares del mundo en una lucha contra la explotación, independientemente de su origen, nacionalidad, género, color, religión o cualquiera otra diferenciación insustancial. Durante los años recientes, la FSM y sus afiliados han organizado una amplia variedad de actividades, iniciativas, seminarios, jornadas de acción internacionales y manifestaciones militantes en defensa de los intereses de los refugiados.
Estamos insistiendo en favor de la creación de centros de bienvenida y hospitalidad dignos, que deben proveer alimentación y atención sanitaria, como también educación para los hijos de los refugiados. La protección de los refugiados es una obligación de los Estados de los países de acogida y éstos no deben transferir este deber a las ONG y sus operaciones controvertidas. Exigimos la simplificación y aceleración de todos los procedimientos relacionados con el transporte en condiciones seguras de los migrantes hasta sus países de destino finales. Continuaremos e intensificaremos nuestra lucha para garantizar las libertades democráticas y los derechos civiles, los salarios dignos, las condiciones laborales y de vida adecuadas, la seguridad y la prosperidad para todos los refugiados. Estamos fortaleciendo nuestras voces por la disolución de la OTAN y por la abolición de las intervenciones imperialistas. Nos oponemos a todas las formas de discriminación y racismo. Aislamos a la extrema derecha, al neofascismo y la xenofobia que están sembrando veneno, obscureciendo la verdadera división de la sociedad entre explotadores y explotados, que están al servicio de la perpetuación de la barbarie capitalista.
Con motivo de este Día Mundial de los Refugiados, la FSM exhorta a sus más de 100 millones de miembros en 130 países de los 5 continentes a proseguir y robustecer sus luchas, en cada sector y en cada región, en favor de la plena y serena integración de los inmigrantes en las sociedades locales y todos los aspectos de la vida social, incluidas las organizaciones sindicales.