Tras el horrible crimen acaecido en Tempi (Grecia), la colisión de dos trenes que costó la vida a 57 personas, en su mayoría jóvenes y estudiantes, los sindicatos y federaciones sindicales decidieron hacer dos huelgas.
En la primera, el 8 de marzo, la participación de los trabajadores fue inesperadamente grande. Cientos de miles de trabajadores, estudiantes escolares y universitarios participaron en la manifestación, codo con codo, al grito de «Vosotros contáis vuestros beneficios, nosotros contamos las vidas humanas». Transformaron su rabia en una lucha contra las políticas de todos los gobiernos actuales y anteriores (ND, SYRIZA- PASOK) que ponen nuestras vidas en la balanza del coste-beneficio.
En la segunda, el 16 de marzo, también tuvimos una gran manifestación con miles de trabajadores en huelga, marchando y gritando «SYRIZA-PASOK- ND, este crimen tiene historia» mostrando que todos ellos son responsables de la situación del sistema ferroviario que causó 57 muertes.
Todas esas personas en las calles declararon que no permitirán que se olviden u oculten las causas y los responsables de este crimen. Marcharon para decir que nuestras vidas no son ganancia; dijeron «basta» a la política que sacrifica todas nuestras necesidades en el altar de la ganancia.
De todas esas deficiencias son responsables todos los gobiernos hasta ahora: conservadores, progresistas, neoliberales, socialdemócratas o supuestamente de izquierdas.
Nuestras vidas importan, no los beneficios
Lucha por nuestras necesidades y no por el beneficio de unos pocos
