Discurso de Nuno Gonçalves de la FEVVICOM au 13o Congreso de la CGTP-IN
Compañeros,
En nombre de la FEVICCOM – Federación Portuguesa de Sindicatos de la Construcción, Cerámica y Vidrio, damos la bienvenida a todos los delegados e invitados en el 13º Congreso de la CGTP – IN.
Nuestro Congreso es un espacio privilegiado para debatir, reflexionar y hacer un balance sobre el trabajo realizado en los últimos cuatro años, labor que requiere que todos en cada momento redoblen esfuerzos para hacer frente a la masiva ofensiva lanzada contra los trabajadores.
Esta ofensiva de la patronal y el gobierno de derecha, no es sino un ajuste de cuentas con los logros, las garantías y las conquistas sociales de los trabajadores. Un ajuste de cuentas con las luchas y aspiraciones de generaciones de trabajadores que no se rinden, y que aspiran a y luchan por una vida mejor. Pero este también es un tiempo para la reflexión, el debate, para pensar y trazar caminos y estrategias para el futuro.
Este Congreso tiene lugar en una etapa que presenta para nosotros complejidades y desafíos diversos. Pero también es un momento en que, como la vida da fe, la lucha, en el lugar de trabajo, de los trabajadores, para sus justas demandas y su fuerza, ha dado en un montón de batallas, de combates, resultados positivos.
Los sectores representados en los sindicatos afiliados en la FEVICCOM, que van desde Construcción, Cerámica, Vidrio, Cemento, Madera y Corcho, han sido y son los sectores más afectados por el cierre de un gran número de empresas y la correspondiente destrucción de miles de puestos de trabajo, con consecuencias sociales devastadoras para los trabajadores y sus familias.
Pero si demasiada fue la destrucción, todavía quedan miles de trabajadores y muchos lugares de trabajo con un gran potencial para la sindicalización. Hay muchos trabajadores que no están todavía sindicalizados, situaciones cada vez más graves de gran precariedad, con rendimientos cada vez más bajos y toca escuchar, organizar, supervisar, aclarar y movilizar.
Con este fin, es necesario poner en práctica la Acción Unida Integrada con los objetivos y metas definidas colectivamente para cada estructura. Se deben tomar medidas para mejorar aún más los estilos de trabajo con el fin de adaptar y hacer más eficaz nuestra intervención sindical. Con la evaluación periódica y los cambios que son necesarios.
Una acción que no sea pura formalidad o papeleo, sino que ha sido trabajada en conjunto, en todos sus componentes, mediante la sindicalización, el fortalecimiento de la organización de base, la elección de mayor número de delegados sindicales y de representantes de la Seguridad y Salud en el Trabajo.
Una acción que responda a las justas aspiraciones de los trabajadores, para contribuir mejor al progreso de la sociedad, con una mejor calidad de vida, mejores condiciones de trabajo, con una distribución más justa de la riqueza creada, más empleo y más derechos sociales y laborales.
Es necesario ser, desde el lugar de trabajo, más exigentes y promover medidas organizativas tendientes a expandir la dinámica de la lucha por mejores salarios, horarios reducidos y mejores condiciones de vida para todos los trabajadores, y responder a la aplastante explotación de las grandes empresas que impunemente violan los derechos, bloquean la negociación colectiva, las relaciones laborales, y deshumanizan con las peores condiciones de trabajo.
Vivimos años de ataques y de bloqueos de la negociación colectiva, llevados a cabo por los empleadores y por los sucesivos gobiernos.
Por los empleadores, ya que bloquean las negociaciones y desean la expiración de las convenciones y por los gobiernos que han creado y mantenido la expiración de la ley.
En este contexto, es necesario que la negociación colectiva sea asumida y valorada por nosotros en conjunción con los trabajadores, para que conozcan y ejerzan sus derechos, para estén informados, especialmente entre los jóvenes y los que todavía tienen vínculos débiles.
En el marco de la negociación colectiva en las empresas y los lugares de trabajo, contra la explotación, contra la imposición unilateral de las reglas en las relaciones de trabajo por parte del empleador, ahí también yacen las raíces del sindicalismo. Los trabajadores seguirán acopiando fuerza para impulsar la negociación colectiva, proteger sus derechos y mejorar sus salarios y su jornada laboral.
Es de esta forma que la lucha organizada de los trabajadores y el fortalecimiento de los sindicatos – por mucho que les cueste a los defensores de la vuelta al pasado, cuando el empleador imponía unilateralmente su voluntad – contribuirán a la obtención de sus demandas y aspiraciones hacia el progreso social.
Es hacia este futuro que, con la fuerza y persistencia que nos caracterizan, lucharemos y obraremos en pro de sus derechos, la soberanía y el progreso social.
¡Vivan todos los trabajadores!
¡Viva la CGTP – IN!